Ganar dinero con las apuestas deportivas sería maravilloso, ¿verdad? En esta guía vamos a explicarte qué debes saber para conseguirlo, pero antes déjanos aclarar algo: saber esto no te garantiza nada. Es la aplicación de los conceptos lo que finalmente marca la diferencia entre el éxito y el fracaso.
En BettingGuide recomendamos hacer apuestas como forma de diversión y nunca con la intención de ganarse la vida. Esto último es extremadamente difícil y puede llevarte a conductas peligrosas relacionadas con la adicción al juego. Así que ya sabes, si juegas, hazlo responsablemente.
Antes de leer esta guía sobre cómo ganar en las apuestas deportivas, te recomendamos encarecidamente que leas nuestra guía sobre si se puede vivir de las apuestas, ya que te ayudará a afrontar todo lo demás con una visión mucho más realista.
Todos nos consideramos expertos en nuestro deporte favorito, pero cuando llega el momento de hacer apuestas deportivas, la realidad es que muy pocos consiguen beneficios. Aquí te ofrecemos algunos consejos para que mejores tus estrategias:
A continuación, vamos a explicar en detalle cada uno de estos consejos para ganar con las apuestas deportivas.
Para ganar con las apuestas de deportivas necesitas ser objetivo y evaluar los partidos para tratar de predecir quién va a ganar o qué va a ocurrir.
Si te pones a apostar en partidos de fútbol de tu equipo favorito es muy probable que sobreestimes pequeños detalles que no tienen tanta importancia. Quizá creas que tu delantero es tan bueno que siempre marca o estás deprimido por la última derrota inesperada, pero sea como sea es muy probable que mires a tu equipo desde la emoción y no desde la razón.
Cuando apostamos siempre tratamos de adivinar qué ocurrirá en esta ocasión. Sin embargo, si tu objetivo es ganar con las apuestas deportivas debes pensar en términos de probabilidad.
Cuando haces apuestas deportivas, es inevitable perder algunas. El objetivo no es no perder nunca, sino ganar más cuando ganas de lo que pierdes cuando pierdes. Por tanto, la forma de afrontar una apuesta es pensar si en el caso de que se repitiese esa apuesta infinitamente, valdría la pena hacerla.
Esto es así porque en un juego concreto siempre hay un componente de azar incontrolable. Por tanto, si vas a apostar por la victoria de Brasil frente a Perú a cuotas de 1.60, es porque piensas que, si repitieses esa apuesta un millón de veces en un millón de partidos, obtendrías ganancias. Es decir, que el dinero que ganaste al acertar esas apuestas compensarían las pérdidas de las veces que fallaste la apuesta.
Siempre es buena idea echar un vistazo a algunas estadísticas.
Si, por ejemplo, vas a apostar en partidos de fútbol al ganador del partido:
La prensa genera mucho humo sobre cómo afectan sus relaciones amorosas y vida personal a los deportistas, pero es porque tienen que hablar de algo. Los deportistas suelen ser profesionales y en la mayoría de los casos lo que hacen fuera del campo no afecta tanto a su rendimiento como nos venden los periodistas.
Maradona, Romario, Ronaldinho fueron los mejores de su tiempo y no se caracterizaron por una vida monacal.
Si crees que te arruinaría el día, reduce el valor de la apuesta hasta que pongas una cantidad que realmente no te importaría perder. Esto no es solo por mantener un hábito de juego saludable, sino también porque el apostar montos demasiado altos hace que te impliques demasiado con las apuestas y pierdas objetividad, lo que a su vez deriva en peores decisiones.
Un consejo que repetimos en casi todas nuestras páginas y guías. Cuando se apuesta pensando en compensar las pérdidas pasadas, el cerebro está dejándose llevar por las emociones y arriesgarás demasiado o tratando de apostar en partidos a cuotas demasiado altas o tratando de apostar un valor alto en una apuesta “supuestamente” segura.